jueves, 4 de diciembre de 2014

Te traigo un texto con una breve historia del tiempo de adviento. Espero que te ayude a vivirlo más intensamente.
 

La palabra Adviento proviene del latín "Adventus" que significa la venida. En un principio con este término se denominaba al tiempo de la preparación para la segunda venida de Cristo o parusía y no el nacimiento de Jesús como ahora lo conocemos. Haciendo referencia a este tiempo la primitiva Iglesia meditaba sobre los pasajes evangélicos que hablan del fin del mundo, el juicio final y la invitación de San Juan Bautista al arrepentimiento y la penitencia para estar preparados.

No se sabe desde cuando se comienza a celebrar. En los antiguos leccionarios de Capua y Wursemburgo hacen referencia al Adventus Domini. En los leccionarios gregoriano y gelasiano se encuentran algunas plegarias con el título de Orationes de Adventu. Más tarde comienzan a aparecer las domínicas ante Adventum Domini, en las cuales al término adventus se le asocia con la preparación a la Navidad.

A pesar de que esta temporada es muy peculiar en las Iglesias de Occidente, su impulso original probablemente vino de las Iglesias Orientales, donde era común, después del Concilio ecuménico de Efeso en 431, dedicar sermones en los domingos previos a la Navidad al tema de la Anunciación. En Ravena Italia - un canal de influencia oriental a la iglesia de Occidente - San Pedro Crisóstomo (muerto en 450) daba estas homilías o sermones.

La primera referencia que se tiene a esta temporada es cuando el obispo Perpetuo de Tours (461-490) estableció un ayuno antes de Navidad que comenzaba el 11 de Noviembre (Día de San Martín). El Concilio de Tours (567) hace mención a la temporada de Adviento. Esta costumbre, a la cual se la conocía como la Cuaresma de San Martín, se extendió por varias iglesias de Francia por el Concilio de Macon en 581.

El período de seis semanas fue adoptado por la Iglesia de Milán y las iglesias de España. En Roma, no hay indicios del adviento antes de la mitad del siglo VI AD, cuando fue reducida - probablemente por el Papa Gregorio Magno (590-604) - a cuatro semanas antes de Navidad. La larga celebración gala dejó su presencia en libros de uso litúrgico como el Misal de Sarum (Salzburgo), que era muy usado en Inglaterra, con su domingo antes de Adviento. La llegada de Cristo en su nacimiento fue cubierta por un segundo tema, que también proviene de las iglesias galas, su Segunda venida al final de los tiempos. Este entretejido de temas de los dos advientos de Cristo da a la temporada una tensión particular entre penitencia y alegría en la espera de Cristo que está por "venir".

(Fuente: Churchforum)